Hacer ejercicio tiene efectos emocionales beneficiosos, mantiene las funciones cognitivas al máximo rendimiento, la subida endorfínica es capaz de generar relajación y sensación de felicidad. Salir al aire libre a practicar deporte solo o en buena compañía, es una buena forma de cuidar nuestra salud.
Directamente unido al estado físico de cada persona, está su equilibrio mental, cuyos beneficios son generados por la práctica deportiva. Frecuentemente relacionamos la práctica deportiva con jóvenes musculados y en plena forma, y aunque esto es cierto, no analizamos los resultados psicológicos de practicar ejercicio. Hay un deporte para cada edad, y se hace necesaria la práctica de cualquiera de ellos para completar, el ciclo de salud físico-mental al que cualquier persona aspira.